Hemos seleccionado para ustedes los discos más destacados de junio. Del aire, de J. Zunz, Ugly Seasons, de Perfume Genius, y Big Time, de Angel Olsen, son los discos que encabezan nuestra lista.
Fault Lines – Deliluh
Ya han pasado cinco años desde que Deliluh apareció en la escena musical canadiense con su disco debut titulado Day Catcher (2017), desde entonces, el proyecto ha sufrido cambios importantes, como la salida de dos de sus miembros hasta quedar reducido a un dúo con residencia en Europa.
A pesar de esto, el proyecto sigue más vivo que nunca, y la muestra de ello es su más reciente LP, Fault Lines, que desde su portada minimalista hasta su última canción de casi nueve minutos de duración llamada «Mirror Of Hope», nos lleva de la mano por un viaje taciturno lleno de sintetizadores sacados de una película de ciencia ficción, y arreglos de cuerda majestuosos que le dan identidad y vida propia a cada una de las siete canciones del disco.
Por: Luis Felipe Maceda.
Life Is Yours – Foals
En su nuevo proyecto, los británicos vuelven a la fórmula conocida a lo largo de sus seis discos anteriores, sin embargo, el ensordecedor aire de frescura sónica transmite un nuevo toque a la discografía de una banda ya emblemática, que siempre intenta reinventarse con el paso de los años.
En un primer momento, Edwin Congreave puso en jaque a sus compañeros luego de anunciar su salida de la agrupación para seguir su sueño de realizar un posgrado en Economía en la Universidad de Cambridge. Luego, Yannis Philippakis tuvo que liderar a la banda hacia un cambio del sonido, sin los teclados legendarios del virtuoso tecladista. Y finalmente, el resultado de esa catarsis musical es Life Is Yours, un álbum lleno de nostalgia que libera los recuerdos de cada integrante de la banda.
Por: Ricardo Hernández.
Get on the Otherside – Bobby Oroza
Según las palabras del propio Bobby Oroza, la pandemia le afectó considerablemente a nivel creativo. En un primer momento, la imposibilidad de presentarse en vivo hizo que se enfocara en su familia y realizar tareas del hogar —algo que agradece infinitamente—, sin embargo, el encierro también provocó que se cuestionara su propia vida, cambiara su personalidad, y modificara su forma de hacer música.
En medio de este proceso de autoexploración nació su segundo material discográfico, Get on the Otherside, en el que somos testigos de su proceso de transformación como escritor y compositor al entregarnos canciones con letras más reflexivas y con un sonido cada vez más propio, que se mueve entre el soul y el R&B contemporáneo. Sin duda, será interesante escuchar los próximos trabajos del músico finlandés.
Por: Luis Felipe Maceda.
Fire Doesn’t Grow On Trees – The Brian Jonestown Massacre
The Brian Jonestown Massacre creó una nueva oda lírica y sonora en su discografía; su nuevo álbum invita a nunca rendirse sin importar cuál sea el obstáculo en la vida, incluso saltar al fuego si es necesario o elegir la espada en vez de la pared. Sin duda, Fire Doesn’t Grow On Trees se convertirá en un clásico en la discografía de los americanos, digno de sus mejores trabajos de la década de los noventa.
Por: Ricardo Hernández.
Sometimes, Forever – Soccer Mommy
Soccer Mommy regresó con su nuevo álbum de estudio bajo el cobijo del productor Daniel Lopatin. La línea argumentativa de Sophie Allison sigue el camino trazado en su disco anterior, Color Theory (2020), con guitarras y sintetizadores que elevan la voz de la cantante a un pedestal.
Sometimes, Forever presenta un mar de oscuridad y calma profunda, donde el dolor ni la felicidad son para siempre; son solo un instante. Su nuevo material hace énfasis en el vacío de una vida atormentada, pero llena de amor, uniendo varios hilos argumentativos a través de sus canciones.
Por: Ricardo Hernández.
Ugly Season – Perfume Genius
La música de Michael Hadreas, mejor conocido como Perfume Genius, siempre ha gozado de cierta sensibilidad y expresividad corporal/sexual casi indescriptible, de ahí que no fue ninguna sorpresa saber que iba a colaborar con la coreógrafa estadounidense, Kate Wallich, para musicalizar su pieza de danza contemporánea titulada The Sun Still Burns Here. De esta colaboración, el músico publicó dos sencillos maravillosos en 2019, «Eye In The Wall» y «Pop Song», y después dejó el proyecto en segundo plano para enfocarse en el lanzamiento de su quinto LP, Set My Heart On Fire Immediately (2020), que fue considerado uno de los mejores discos del año.
Sin embargo, en este año Hadreas decidió retomar el proyecto y sacarlo a la luz bajo el nombre de Ugly Season, una obra conceptual en la que deja de lado su voz cristalina para experimentar con el sonido y trazar paisajes sonoros tan hermosos como espeluznantes. A través de 13 piezas explora con la electrónica, el ambient, el chamber pop, la bossa nova y el reggae, hasta formar lo que fácilmente puede ser considerado como su disco más complejo y significativo.
Por: Luis Felipe Maceda.
Big Time – Angel Olsen
Probablemente Big Time es el álbum más personal de la oriunda de Carolina del Norte, ya que se realizó en medio de cambios importantes en su vida. Sin duda, las buenas y malas noticias que recibió tuvieron gran repercusión en las letras de cada canción del álbum, dotándolo de una textura sin igual.
De esta forma, Angel Olsen navega por el country americano a través de su voz angelical. La calma de cada arpegio traslada al más incauto por un viaje lleno de sonidos naturales de la vida cotidiana hasta el ensordecedor trémolo del regreso a casa.
Por: Ricardo Hernández.
Del aire – J. Zunz
El tercer material discográfico de J. Zunz, conocida por ser parte de Lorelle Meets the Obsolete, captura a la perfección la tensión emocional y atmosférica que vivió la compositora durante su grabación en Ensenada, Baja California. Es por eso que las seis canciones que lo conforman están cargadas de una tensión disruptiva; que aumenta a la par de los sintetizadores etéreos, las guitarras distorsionadas y la voz misteriosa —donde la hay— de la propia Lorena Quintanilla.
Tal vez Del aire sea un disco pantanoso que resulta desafiante en un primer momento, pero tiene una virtud liberadora y catártica que no había estado presente en ninguno de sus trabajos anteriores como solista, y mucho menos con Lorelle Meets the Obsolete.
Por: Luis Felipe Maceda.