Hemos seleccionado para ustedes los discos más destacados de julio. Fare Fare, de Working Men’s Club, Hellfire, de black midi, y Cave World, de Viagra Boys, son los discos que encabezan nuestra lista.
Milenios en este cuarto – Pirineos en llamas
Esta banda colombiana comenzó a dar sus primeros pasos a finales de 2019, sin embargo, no fue hasta 2021 que por fin publicaron su álbum debut titulado Soliloquio, una buena carta de presentación en la que dejaron en claro su interés por explorar géneros como el post-punk, el indie rock y el shoegaze.
De esta primera llamarada de creatividad también se desprende su más reciente EP, Milenios en este cuarto, material que a pesar de su corta duración —apenas 18 minutos— se siente como un hermano mayor de Soliloquio; mucho más maduro, con un sonido más definido y con letras más críticas e introspectivas. Resulta difícil saber qué dirección tomará el cuarteto, pero, sin duda, tienen un futuro brillante.
Luis Felipe Maceda.
The Other Side Of Make-Believe – Interpol
Después de cuatro años de ausencia, en los que pasaron más penas que glorias, Interpol publicó su séptimo álbum de estudio bajo el brazo de Matador Records, en el que la desinformación y las diferentes maneras de pensar sobre un mismo tema son la base de las letras, mismas que, a su vez, combinan el presente y el pasado de la banda.
Interpol también expresa un nuevo enfoque en su sonido, dejando de lado la voz y los gritos místicos de su líder, Paul Banks, para dar paso a una faceta más calmada, sin embargo, los rasgueos característicos de la guitarra de Daniel Kessler continúan proliferando a lo largo del disco.
Ricardo Hernández.
Gemini Rights – Steve Lacy
Si nunca han tenido la oportunidad de acercarse a la música de Steve Lacy, tal vez Gemini Rights sea la mejor forma de hacerlo. Su más reciente material discográfico no sólo es muy accesible y agradable desde su primera escucha, sino también deja entrever el enorme talento que tiene el músico, productor y compositor originario de Compton, que realizó el 90% de la producción de este álbum.
Aunque Lacy se siente muy cómodo experimentando con el R&B, aquí decide tomar algunos riesgos al incorporar elementos de otros géneros musicales, como la bossa nova que se hace presente en el primer sencillo del disco titulado «Mercury» o los sutiles toques de soul psicodélico que envuelven temas como «Ambar» o «Give You the World».
Luis Felipe Maceda.
Giant Palm – Naima Bock
Naima Bock sorprendió a todos con el anuncio de su carrera en solitario después de su paso por la agrupación Goat Girl, por supuesto, su nuevo proyecto guarda la base de su origen británico, combinándolo con sus raíces brasileñas al puro estilo de la bossa nova y el folk. Al mismo tiempo, el cambio de sonido en su música es evidente con toques armoniosos y llenos de luz universal.
La bajista oriunda de Glastonbury, creó una nueva fase en su trayectoria musical con el firme convencimiento de que la música puede curar un alma herida. Giant Palm está fuertemente influenciado por las melodías que escuchaba de niña y, en particular, en la yuxtaposición de la tragedia y la belleza que está contenida en las letras de cada tema.
Ricardo Hernández.
Cave World – Viagra Boys
Tal vez me escuche repetitivo al decir que la música de los Viagra Boys es inclasificable, pero es que realmente es difícil describir el sonido de una banda que no sólo evoluciona con cada disco, sino también con cada canción que forma parte de sus producciones.
Si bien, en Street Worms (2018) y Welfare Jazz (2021) está clara su inclinación por el post-punk y el punk-rock, en Cave World desdibujan las fronteras para crear un cóctel sonoro que también se alimenta de otros géneros musicales, como el dance-punk, el new wave y el rock alternativo. Pero el disco no es sólo atractivo por su embriagadora paleta de sonidos, también por las severas críticas que lanza acerca de la desinformación relacionada con el COVID-19 y las consecuencias que puede provocar toda la información basura que circula a través de diferentes medios.
Luis Felipe Maceda.
Entering Heaven Alive – Jack White
A lo largo de su carrera, Jack White ha pasado por todos los géneros musicales que existen hasta la fecha, y su nuevo álbum de estudio es otra muestra de su versatilidad cómo multiinstrumentista; versatilidad que le ha permitido llegar como solista a la nada despreciable cantidad de cinco álbumes de estudio.
Entering Heaven Alive es el amanecer de un artista fuertemente influenciado por The Beatles, cuya carrera musical ha marcado una pauta en el sonido constantemente experimental de White. Sin duda, el juego de sonidos en el que incluso está presente una marimba es la muestra perfecta de ello.
Ricardo Hernández.
Fear Fear – Working Men’s Club
Pocas bandas tienen la capacidad de evolucionar tanto de su primer disco a su segundo material como Working Men’s Club, y eso es decir mucho considerando que con su álbum homónimo el proyecto de Manchester, liderado por Sydney Minsky-Sargeant, se llevó los elogios generalizados de la crítica y formó una base de fans muy sólida en Occidente.
Sin embargo, en Fear Fear la agrupación no sólo se preocupó por hacer música destinada para la pista de baile, también trató de crear canciones que mostrasen su verdadero corazón, con letras más comprometidas que reflexionan acerca de la muerte, la aceptación, el presente, el mundo digital y la humanidad; temas que claramente se contraponen con su música cargada de energía juvenil, que a veces nos rememora a proyectos míticos como The Human League, Soft Cell, Gary Numan o The Psychedelic Furs.
Luis Felipe Maceda.
Hellfire – black midi
A pesar de tener una corta carrera musical, black midi deja sensaciones de frescura con cada trabajo publicado y por supuesto que esta vez no fue la excepción. La tercera entrega de la banda inglesa tiene tintes de ópera rock, al puro estilo de Zappa o Bowie, que no defrauda en absoluto a sus fanáticos.
Hellfire está basado en los elementos melódicos y armónicos de su disco anterior titulado Cavalcade (2021), pero, al mismo tiempo, también expande todos los sonidos que presentó en su álbum debut, Schlagenheim (2019). Claramente, la mezcla de sus trabajos anteriores dio como resultado su trabajo más fructífero hasta el momento.
Ricardo Hernández.
