«Zeros» – Declan McKenna Una electrizante odisea retro-futurista

El segundo álbum del músico británico entrega el sonido de una narración extraordinaria del universo y lo mundano.

En 2014, la Copa Mundial de Fútbol organizada por la FIFA se realizó en un país con graves problemas sociales, económicos y políticos. Los ojos del mundo estaban sobre ellos y Declan Mckenna, un joven estudiante británico, escribía «Brazil» al respecto. Su canción debut llegaba a través de YouTube con una fuerte crítica y una guitarra eléctrica brillante, características que parecen ser una constante en su carrera.

Después, en julio de 2017, What Do You Think About The Car?, su primer álbum, le dio un lugar clave en los géneros pop e indie rock, con canciones estrepitosas como «Humongous» o letras profundas como en «Paracetamol», inspirada en la historia del suicidio de la mujer transgénero, Leelah Alrcon.

Ahora, para su segundo LP, el cantautor evoluciona como artista, presentando un material que parece estar influenciado fuertemente por uno de sus íconos musicales, David Bowie. Es así como de la mano del productor musical, Jay Joyce, quien ha trabajado con bandas como Cage The Elephant, da vida a diez canciones inolvidables que forman Zeros

«You Better Believe!!!» comienza de lleno con un sonido futurista que caracterizará la estética de este álbum, la batería abre camino junto con la guitarra eléctrica y el sonido de transmisiones espaciales terminan por transportarnos hacia la realidad que Zeros representa.

Inspirado en la obra de Sufjan Stevens, se presenta «Be An Astronaut», canción ya conocida para antiguos seguidores de McKenna, pues había sido escuchada hace unos años en algunas presentaciones en vivo, en la cual, a través de la vida de un personaje llamado Daniel, habla de las aspiraciones que se crean al crecer y cómo las personas en ocasiones buscan aplastar a los pequeños soñadores.

Entonces, como si de un regreso a la tierra se tratara, llega «The Key To Life On Earth». Acompañada de un xilófono, esta canción ahonda en la vida cotidiana, necesidades, ambiciones, expectativas y realidades que nos rodean y de las que somos eslabones; vivencias que forman nuestro paso por la tierra.

Estrenada el 29 de enero de este año, «Beautiful Faces» fue el track con el que el LP fue presentado, el cual, con una guitarra explosiva, una letra que deja ver la superficialidad que a veces parece llenar nuestra era y un videoclip que nos lleva de la realidad a lo digital, marca la identidad visual para el resto de la obra.

Con «Daniel You´re Still A Child» parece continuar la historia de «Be An Astronaut». Entre varios elementos, las cuerdas y el sintetizador le dan vida a la canción y nos permiten ver un poco más de la historia del personaje Daniel, quien parece no encontrar un lugar en el que pueda ser comprendido; simplemente ha sido relegado del mundo.

Ahora, comienza la historia de «Emily», donde somos testigos de una relación y un cariño egoísta, versos como: «Emily, don’t you know that it’s hard for me? Yeah To rest when you lie», describen y sintetizan perfectamente toda la historia. El sonido del tema rompe en parte con el estilo de Zeros, pues su guitarra acústica, xilófono y sintetizador logra un estilo encantador que, incluso, recuerda levemente a The Beatles.

«Twice Your Size» retoma la línea del álbum, con una batería que despierta los sentidos, además de una letra que habla del cambio climático y una tierra en decadencia que nos acerca a nuestro propio fin. Después de un corte abrupto, aparecen voces robotizadas para dar paso «Rapture», la cual sigue con la idea de «Twice Your Size», pero en esta ocasión habla del peligro inminente desde un punto más personal; una catarsis la cual se ve reflejada en la voz de Declan.

Justo en el centro de la Vía Láctea se encuentra «Sagittarius A*», una fuente de radio que contiene un agujero negro supermasivo, el cual lentamente consume una parte del universo. Inspirado en esto, Mckenna escribió una canción del mismo nombre, el track parece hacer hincapié en que somos fragmentos en un gran espacio-tiempo queriendo ignorar nuestra autodestrucción.

Para cerrar, «Eventually, Darling» vuelve a una esfera más personal; al aspecto más solitario e individual. Un ambiente melancólico, de pérdida, acompañado de voces robotizadas que logran un tono conmovedor y con la inclusión de violines como acompañamiento, resulta una excelente manera de decir adiós a Zeros, abordando justamente el tema de las despedidas y el desapego al que a veces debemos ceder.

Generalmente cuando un artista se aventura a su segundo material discográfico, suelen existir dudas sobre el rumbo que tomará su carrera, así como expectativas y comparaciones respecto a su trabajo anterior. Pero Declan McKenna llega a nuevos niveles de originalidad, sin dejar detrás el alma encantadora y reflexiva de su música. Su narrativa repleta de referencias deja un gran espacio a la interpretación e introspección, tracks indescriptibles de un artista prometedor que parece encaminar sus pasos a convertirse en todo un ícono de esta generación.